Mantener la competitividad: ¿Qué se requiere para seguir vigentes en microfinanzas?

El documento identifica y analiza la capacidad de las instituciones microfinancieras (IMFs) para ejecutar sus estrategias y alcanzar sus objetivos de negocios, así como también, construir y proteger su valor. Para ello toma en cuenta los aportes colectivos de 39 directivos de asociaciones de microfinanzas en 33 países de África, América Latina, Europa Oriental y Asia. Entre los principales hallazgos del estudio se encuentran:

• Los desafíos más críticos para las IMFs giran en torno a dos temáticas fundamentales que actualmente enfrenta el sector: las verdaderas necesidades del cliente y la manera de apalancar las innovaciones tecnológicas para la prestación de mejores servicios.
• Existe un creciente consenso de que las IMFs deben diversificar rápidamente los productos que ofrecen, no sólo para esquivar la competencia, sino también para satisfacer las necesidades de un mercado más extenso, ampliar sus operaciones y, finalmente, resistir mejor las crisis y fuerzas económicas.
• Preocupa en el sector la capacidad de las IMFs para responder rápidamente ante las tendencias y los desafíos del mercado, así como la habilidad de las asociaciones o redes para apoyar a sus afiliados con los servicios más esenciales.
• A excepción de las asociaciones de microfinanzas en Asia, las demás encuentran que no están bien equipadas para satisfacer las necesidades diversificadas de sus clientes y adoptar las nuevas tecnologías (siendo las IMFs de África las menos preparadas).
• A nivel de oferta de productos, existen barreras como el elevado costo de negociación y un marco normativo poco desarrollado, lo que dificultan el diseño de un abanico de productos y servicios confeccionados a la medida para satisfacer las necesidades del mercado.
• A nivel de demanda, hay factores contextuales como género, educación y nivel de ingresos, así como la carencia de datos sobre el mercado y de regímenes de protección al consumidor, que limitan la aceptación individual de los servicios y la posibilidad de obtener beneficios a partir de los mismos.

El documento concluye que sólo un enfoque integral en el sector que involucre a una amplia gama de actores interesados, proveedores de servicios, productos y tecnologías, bastará para superar las actuales restricciones que dificultan una mayor inclusión por el lado tanto de la oferta como de la demanda.