Ecuador: Supervisión basada en riesgos, eficaz también en pandemia
"Este libro nos presenta una visión muy completa de la evolución de la regulación bancaria internacional y de cómo los diferentes países de la región han convergido, progresivamente a las mejores prácticas internacionales durante la última década de este siglo y de la importancia que tiene la Supervisión Basada en Riesgos (SBR) para elevar la eficiencia y efectividad de las labores de supervisión.
En este texto las autoras hacen una excelente exposición de la importancia que la adopción de la Supervisión Basada en Riesgos (SBR) tiene para el logro de los mandatos de estabilidad financiera y protección del consumidor financiero, que la mayoría de los supervisores de la región comparten en mayor o menor medida.
La SBR enriquece el ejercicio de la supervisión, pues impone al supervisor la necesidad de construir una visión prospectiva de los riesgos materiales que pueden afectar a los depositantes, asegurados, afiliados a la seguridad social y pensionistas, y permite superar el ejercicio de supervisión tradicional del cumplimiento normativo que caracteriza a la supervisión basada en reglas. Por otra parte, devuelve la responsabilidad de la administración de los riesgos de la entidad (incluido el riesgo de cumplimiento legal y regulatorio) a la Junta Directiva y a la Alta Gerencia de las instituciones financieras, y como lo señalan las autoras, redefine la identidad del supervisor y lo devuelve a su ocupación natural: supervisar.
Pero este libro es, sobre todo, un testimonio del esfuerzo que se ha realizado en la Superintendencia de Bancos del Ecuador en los últimos dos años. Con la asistencia del Toronto Centre, que recibió el mandato del International Advisory Group de la OSFI en 2011, la Superintendencia ha superado las condiciones más difíciles imaginables y ha desarrollado y modernizado su marco de supervisión, acercándose a las mejores prácticas internacionales.
Más aún, este texto es un testimonio sobre la capacidad de la Superintendencia no solamente para sobreponerse a las condiciones más adversas, sino que además nos muestra fehacientemente como se pueden aplicar los principios que rigen la actuación de un supervisor prudencial moderno, durante una situación inédita para todos nosotros como fue la pandemia COVID-19.
Como lo demuestra la experiencia de las agencias de supervisión que han sido pioneras en la adopción de la SBR, este es el inicio de un largo camino para mejorar continuamente los marcos de supervisión, para que se ajusten de la mejor manera a los nuevos riesgos que enfrentaran nuestras economías y, por ende, nuestros sistemas financieros."
Juan P. Arango Director de Programa Toronto Centre
