El Microscopio Global de 2020
La crisis de salud mundial provocada por la pandemia de COVID-19 freno gran parte de la economía global cuando los gobiernos de todo el mundo impusieron confinamientos para mitigar la propagación del virus. Las consecuencias económicas de los confinamientos han generado un impacto desproporcionado en las poblaciones de bajos recursos. Al comienzo de la crisis, los bancos centrales reconocieron la necesidad de establecer y fortalecer canales financieros inclusivos para permitir que la liquidez llegara rápidamente al “último tramo” y aliviar el sufrimiento de los sectores más vulnerables.
La crisis puso la inclusión financiera en el centro de las prioridades de los gobiernos mientras intentaban llegar a los más afectados por el confinamiento. Restaurar la economía conllevara más que preservar a los actores poderosos en las economías globales y nacionales; requerirá salvar a las pequeñas empresas y asegurar el empleo a los trabajadores de los sectores formal e informal. La recuperación debe comenzar con los mas vulnerables y seguir avanzando desde allí.
El Microscopio global de 2020 analiza el papel que ha desempeñado la inclusión financiera en las medidas tomadas por los funcionarios frente a la crisis. Proporciona datos sobre cómo los 55 países previstos en el índice han aprovechado sus infraestructuras financieras para brindar apoyo a las personas vulnerables, las pequeñas empresas y los proveedores financieros que prestan servicios a los hogares de bajos recursos.